Loading

Con la encomienda de la recuperación del espacio público a través de la cultura, este jueves abrió al público la exposición Masivos en México Tenochtitlán, en el Museo de la Ciudad de México, con una amena plática con el vocalista y fundador de La Maldita Vecindad, Roco Pachukote, en compañía de la Secretaria de Cultura capitalina, Claudia Curiel de Icaza. 

Acompañados en el patio del recinto por la cantante y conferencista Tere Estrada y Argel Gómez, director de Grandes Festivales de esta dependencia, los ponentes coincidieron en que el Zócalo capitalino (que albergará el próximo concierto de La Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio, el sábado 16 de julio, a las 19:00 horas) es el máximo foro cultural en el que se han dado cita reconocidos artistas.

“Nos pareció importante sumar actividades paralelas, formativas y educativas. El día de hoy queremos presentar esta charla sobre el origen y la evolución de los masivos en la Ciudad de México porque el movimiento cultural del rock, el metal, y de toda la cultura, ha sido fundamental para ganar los espacios públicos”, explicó De Icaza.

Roco Pachukote dio un recuento de la ciudad innovadora y de derechos en que se ha convertido la capital, al recordar lo peligrosa que era la calle para los jóvenes en los años 80 y cómo la libertad de expresión de la juventud atrajo la reapropiación del espacio público a raíz del terremoto de 1985, “que nos dejó visibles las grandes miserias, la injusticia y la corrupción”, dijo.

“Nos hizo reconocernos como hermanos, que todos somos familia y nos podemos ayudar, que la verdadera fuerza está en la gente, en nosotros organizados; que la calle y el espacio público es de  todos nosotros”, expresó el vocalista de la agrupación.

Ante un patio lleno el artista, pugnó por considerar las calles como un espacio de cultura donde todos deben ofrecer lo mejor de sí mismos para embellecer la vida y la ciudad. “El rock mexicano comenzó a reconocerse a sí mismo cuando los grupos empezamos a cantarle a nuestra vida cotidiana con nuestra manera de hablar, con nuestras palabras; a darle valor y a valorar nuestros propios entornos”.

Argel Gómez, director de Grandes Festivales de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, aseguró que la toma del espacio público no es un regalo, sino que se trata de un derecho conquistado por el cual se tuvo que luchar y resistir; y La Maldita Vecindad ha sido clave para abrir esa brecha cerrada tras el Festival de Rock y Ruedas de Avándaro en 1971, que fue calificado por los medios de comunicación y el gobierno como un evento inmoral  e impúdico.

Tras un breve recuento por la historia de los masivos en México, los ponentes coincidieron en que la importancia de esta capital está en el quehacer cultural de diversas generaciones que se han convertido en un espejo social.

“Los grandes conciertos son expresión de los sentimientos, de las luchas y de las pasiones de la sociedad”, dijo Gómez; quien aseguró que el Zócalo se ha convertido en “la meca de los grandes conciertos masivos en América Latina, donde hay gran interés de muchos grupos importantes para tocar base ahí y encontrarse con el público mexicano que es especialmente cariñoso, participativo y abierto a la diversidad”.

Por su parte, Tere Estrada, músico y autora de Sirenas al ataque, hizo una distinción a las mujeres que siempre han estado en la historia del rock, pero que lamentablemente no han tenido la fama ni el reconocimiento que se merecen, como Margarita Bauche, Baby Bátiz, Cecilia Toussaint, Rita Guerrero y Julieta Venegas, entre muchas más.

La muestra hace un recuento desde el primer concierto de rock masivo y gratuito en 1986, organizado por el movimiento estudiantil en Ciudad Universitaria, donde destacó la participación de Cecilia Toussaint. De igual forma, se muestra el cartel e imágenes del concierto de apoyo a la lucha zapatista en 1995, en el Estadio de Prácticas de C.U.

Los visitantes podrán ver un recuento narrado por la prensa del concierto que Caifanes dió en 1995 en Venustiano Carranza, tras el cual el último regente de la capital prohibió los conciertos de rock; y la llegada del gobierno democrático abrió los espacios públicos en 1998 con las “7 tocadas capitales” que el gobierno reconoció como derecho de la juventud al espacio público.

La exposición estará abierta del 7 al 15 de agosto de manera gratuita en el Museo de la Ciudad de México, ubicado en José María Pino Suárez 30, Centro Histórico. El acceso se efectuará bajo todas las medidas sanitarias.

Información: ANG 11-18MX

Fotografías: Cliserio Briseño.