Loading

Ciudad de México, 23 de noviembre 2019.-  En una noche histórica para el deporte blanco de México, Roger Federer venció en tres sets a Alexander Zverev, duelo que impuso nuevo récord mundial de asistencia para un partido de tenis, con 42 mil 575 aficionados en la Plaza de Toros México, que registró un lleno impresionante pocas veces visto.

Desde el inicio del calentamiento, Roger como lo prometió, salió con su playera verde en honor al público mexicano, mientras que Alexander Zverev utilizó en esos cinco minutos una camiseta negra de la selección mexicana de futbol y unos llamativos zapatos en homenaje a la cultura de nuestro país con imágenes en color dorado, lo que fue ovacionado por los aficionados.

En una auténtica fiesta deportiva Su Majestad vino de atrás para superar al jugador alemán por parciales de 3-6, 6-4 y 6-2, con lo que colocó la serie 2-1 en su favor en la gira latinoamericana de ambos jugadores.

En el primer set, un par de rompimientos de Zverev le dieron la ventaja ante un público que se mostró sorprendido por su buen juego y en especial por su potente servicio. Durante este parcial algunos detalles curiosos se presentaron, cuando de la tribuna surgió el grito de “Acapulco” cuando Roger se prestaba a servir, y  el suizo solo esbozo una sonrisa.  El segundo momento destacado, fue cuando de la misma tribuna alguien le gritó “vamos Rafa”,  obligando a su majestad a voltear y decir “no”.

En el segundo set vino la reacción del suizo, quien quebró dos veces,  suficientes para empatar el partido por 6-4, no sin antes posar para los fotógrafos en plenos puntos y para la tribuna.

Con un Zverev que mostró algunas molestias en el costado derecho que le obligó a bajar su ritmo de partido, Roger inició a tambor batiente el tercer parcial para romper el servicio del alemán  en dos ocasiones,  para llevarse el triunfo por 6-3.

El momento más emotivo del partido se dio a la mitad del tercer parcial, cuando Federer corrió hacia su banca por una raqueta extra, la cual regaló a uno de los niños que todo el tiempo estuvo apoyándolo en el partido, su nombre Emiliano Jiménez, quien con llanto recibió el regalo y no solo eso, sino un par de pelotas más que Federer le lanzó ante la algarabía del público, que le festejó todo, incluidos algunos pasos de baile que el mismo pidió con palmas a todos sus seguidores.

Durante varios lapsos del partido, Federer fue interrumpido en su saque con gritos de “Te Amo Roger”, quien correspondió con un “I love you too”  y una gran sonrisa. También hizo un saludo militar a la tribuna donde abundaban las banderas suizas.

Al final del partido, Roger y Alexander recibieron un trofeo muy especial con la figura del árbol de la vida, y  también el tradicional sombrero de charro mexicano, con el cual dieron la vuelta olímpica para agradecer a los aficionados su presencia.

Ambos jugadores agradecieron a toda la gente su maravilloso recibimiento y su entrega para lograr un maravilloso marco, con el cual Roger Federer cerró con un “Viva México, Muchas Gracias”.

Así concluyó el regresó a México de Federer con 23 años de experiencia más que en 1996 cuando lo hizo por primera vez, siendo un jugador desconocido, pero hoy como el tenista más reconocido de la historia, lo que manifestó en la tribuna.

Información/Mextenis/Fotografías/Edgar Flores.